¿Cuál es la educación que se necesita hoy?

Si no es la obediencia y no es la felicidad sin frustración, entonces, ¿cuál es la educación que debemos promover las madres, padres y cuidadores de hoy? La invitación es a la práctica de una CRIANZA AMOROSA PARA LA VIDA donde esté presente el respeto, el amor y la comprensión de los distintos momentos del desarrollo de los seres humanos. Nos referimos a una crianza pensada para el bienestar y para desarrollar habilidades para el futuro, para la superación de obstáculos, para una buena autoestima, para el desarrollo de habilidades de comunicación y de pensamiento crítico, habilidades sociales y emocionales, la responsabilidad con libertad, la consecución de objetivos y muchas otras características que harán de nuestras niñas, niños y adolescentes personas más satisfechas y realizadas con sus propias vidas.

El gran reto para lograr este tipo de crianza es lograr un equilibrio entre el control y el establecimiento de límites, con el respeto, el afecto y la participación propia del estilo democrático. En este estilo, el adulto no tiene una figura de poder y dominancia, sino de líder. El líder sabe el camino, sabe qué quiere, pero invita a seguirlo a través de la persuasión, la participación y la inspiración. Para ser una madre, padre y cuidador líder e inspirador se necesita el afecto y la construcción de una relación fuerte y cooperativa, donde los adultos tienen claros los valores y los objetivos y lo hacen de manera amable, afectuosa y respetuosa.

La magia de la crianza amorosa es combinar el control y el establecimiento
de límites con una relación afectuosa, respetuosa y amorosa al mismo tiempo.